Natación

Se impone la lógica; el Grupo 18 tendrá dos subgrupos con criterios de proximidad geográfica

La Federación de Fútbol de Castilla-La Mancha está trabajando en el comienzo de la próxima temporada y, a falta de la confirmación oficial por parte del propio estamento federativo, ya se ha decidido como estarán conformados los subgrupos en el Grupo 18 de Tercera División.

Según hemos podido saber, los criterios que seguirá la FFCM para determinar los equipos que formarán los dos subgrupos, serán por proximidad geográfica. Todo indica que finalmente se ha impuesto la lógica y se ha descartado el sistema de ‘cremallera’.

De tal forma y como ya informábamos en el artículo que publicábamos el pasado 13 de mayo, cuando existía la incertidumbre de la forma en la que se compondrían los grupos, todos los equipos de Tercera División se ahorrarán un buen número de kilómetros durante la temporada regular.

Los dos subgrupos en Tercera División quedarán así:

GRUPO 1

  • ATLÉTICO ALBACETE BALOMPIÉ
  • ATLÉTICO IBAÑÉS
  • LA RODA CF
  • UD ALMANSA
  • CD HURACÁN DE BALAZOTE
  • CD MANCHEGO CIUDAD REAL
  • MANZANARES CF
  • ALMAGRO CF
  • CALVO SOTELO PUERTOLLANO
  • CF LA SOLANA
  • CD QUINTANAR DEL REY

GRUPO 2

  • CD GUADALAJARA
  • CD AZUQUECA
  • CD MARCHAMALO
  • CD TOLEDO SAD
  • CD MADRIDEJOS
  • CD VILLACAÑAS
  • CD ILLESCAS
  • CD TORRIJOS
  • UB CONQUENSE
  • CD PEDROÑERAS
  • CD TARANCÓN

La fecha de inicio de la competición todavía está por determinar, pero tras la reunión mantenida por las Federaciones Territoriales con la RFEF, se trabaja para que la vuelta del fútbol se produzca lo antes posible, siempre que se puedan cumplir los protocolos sanitarios correspondientes.

La FFCM está confeccionado los protocolos necesarios que deberán ser aprobados después por la Dirección General de Deportes, Consejería de Educación, Cultura y Deporte, y por la Consejería de Sanidad.

La federación presidida por Pablo Burillo se ha comprometido con los clubes a comunicar el comienzo de la temporada con al menos 30 días de antelación, una vez que dicho protocolo sea aprobado por los poderes públicos competentes.

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