El fútbol modesto no quiere parar y pide público en los estadios
Tras la reunión mantenida entre las Federaciones Territoriales y la RFEF la conclusión es que el fútbol modesto no tiene intención de paralizar las competiciones. Muy al contrario, tanto los clubes de 2ªB y Tercera, como las propias Federaciones, preparan una acción común para solicitar a las Comunidades Autónomas que se permita la presencia de público en los estadios de fútbol de todas las categorías.
Sin la presencia de los aficionados y, por tanto, sin los ingresos que reportan a los clubes con las taquillas y los abonos, son muchos los que, a lo largo y ancho del país, ya tienen muchas dificultades para afrontar el pago de las nóminas a sus futbolistas, o incluso para poder abonar los recibos arbitrales de cada jornada.
El mundo del fútbol se intentará acoger a un estudio realizado desde el propio Ministerio de Sanidad, según el cual, la incidencia del COVID-19 en el ámbito deportivo es prácticamente residual en comparación con otras actividades que sí que son claros focos de contagio y que por el momento están permitidas.
Según este estudio, a fecha 8 de noviembre de 2020, la incidencia de la pandemia en el entorno deportivo es del 0,41% en cuanto a brotes aparecidos y del 0,34% sobre el global de casos detectados. Con estos datos, los clubes del fútbol modesto entienden que es posible el deporte con público, sobre todo en espacios abiertos, y esperan que los gobiernos autonómicos den su consentimiento, comprometiéndose por su parte a llevar a cabo todos los protocolos necesarios y a tomar nota de todos y cada uno de los espectadores que acudan a los estadios, anotando todos los datos personales necesarios para llevar a cabo los rastreos si fuesen necesarios.
Sin aficionados el fútbol “no profesional” se muere y si la situación continúa prolongándose, es muy probable que nos veamos avocados a la desaparición de muchos equipos históricos en estas categorías.