(4-0) El Juvenil A de la U.D.Almansa pasó por encima de un Al-Basit A que ni jugó ni supo perder
Victoria cómoda del Juvenil A de la U.D.Almansa por 4-0 frente a un Al-Basit A que no tiró ni una sola vez entre los tres palos del portal almanseño y que se llevó cuatro goles como se pudo haber llevado seis.
El partido comenzaba con un gran gesto de apoyo, por parte de los jugadores, hacía Miguel Díaz, uno de los guardametas del equipo que ha contraído mononucleosis (enfermedad del beso) y que estará alejado de los terrenos de juego durante un tiempo. El equipo formó en la foto del once inicial con una camiseta con el nombre de Miguel y el número 1.
Desde el comienzo del partido los dos equipos dejaron claro a lo que querían jugar; el Almansa A, a tener el balón, jugar por las bandas y tener presencia en el área rival. El Al-Basit A, a nada. Nada más comenzar el encuentro, Eduardo, el guardameta albaceteño, que fue el mejor de su equipo, salvó al Al-Basit del primer gol en un mano a mano con Berna. El delantero almanseño se plantó solo en la frontal del área e intentó superarle con una vaselina, pero el portero albaceteño consiguió sacar la mano en el último momento y despejó la pelota.
El primero de la tarde llegó pronto, en el minuto 6, después de una buena jugada por banda izquierda que terminó con un buen centro a la cabeza de Berna para que el delantero almanseño cruzase de forma impecable para alojar el balón en el fondo de la portería visitante, estableciendo de ese modo el 1-0. Los de Juan Carlos Martínez estaban jugando bien y llegando insistentemente al marco rival, pero poco a poco, los jugadores almanseños se fueron contagiando del mal juego, o mejor dicho del “no juego” de sus rivales y el partido se fue convirtiendo en un tostón.
Hubo algunas jugadas esporádicas que de vez en cuando sacaban a los espectadores del tedio general que provocaba el partido, pero unas veces el portero visitante y otras, simplemente que el balón no quiso entrar, impidieron que el marcador fuese más abultado en el descanso al que se llegaba con victoria local por 1-0.
En el comienzo del segundo tiempo se vio otro aire al equipo, el Almansa A no quería que se complicara el partido y salió a resolver cuanto antes. En el minuto 53 llegó segundo, Sapena recibió dentro del área rodeado de contrarios, vio la llegada desde atrás de Peque y le dejó el balón de cara para el centrocampista, que aprovechó el aclarado que hizo el propio Sapena para internarse en el área y fusilar a Eduardo convirtiendo el 2-0.
El partido era un monólogo del conjunto almanseño, el Al-Basit ni estaba ni apareció en ningún momento, Jhon fue un espectador más que solo tuvo que intervenir en una ocasión, con el partido prácticamente finalizado en un lanzamiento potente y cruzado que desvió muy bien. Mientras tanto el equipo almanseño seguía generando juego y la goleada se veía venir.
En el minuto 75 llegó el 3-0 al sacar Costa una falta lejana aparentemente al área, pero el viento desvió la trayectoria del balón lo suficiente como para sorprender a Eduardo, que cuando quiso reaccionar ya tenía el balón dentro de su portería. En el minuto 88 llegó el gol de Villa que cerraba el partido. Sapena, que aunque no marcó completó un gran partido, realizó una gran jugada individual para internarse en el área, sorteó la salida del portero y mandó el balón raso hacía el portal visitante, un defensor tuvo tiempo de llegar y sobre la misma línea sacar la pelota, el rechace lo recogía Villa, el delantero no se lo pensó y mandó un tremendo zambombazo que se incrustó en la red estableciendo el 4-0 con el que llegaríamos al final del choque.
Una vez finalizado el partido hay que lamentar la triste imagen ofrecida por algunos jugadores del Al-Basit, que durante el partido se había quedado con 9 jugadores sobre el campo. Especialmente reprobable y triste fue el comportamiento de Alberto Fajardo, que cuando el almanseño Luis Gorreta se acercó para darle la mano una vez que el colegiado había pitado el final, este chaval escupió a la cara del jugador local en un gesto barriobajero y siempre lamentable, pero mucho más cuando hablamos del Juvenil de una Escuela de Fútbol, en la que se supone, además de intentar enseñar a jugar al fútbol, se deberían inculcar unos valores y unos conceptos que por lo que vimos, no todos han comprendido. Cuando se habla de fútbol base, resulta muy importante que los chavales aprendan a jugar, pero también que aprendan a comportarse y a perder.
Mención aparte también merecen algunos aficionados del equipo albaceteño, que ya desde su entrada en recinto dieron la nota negándose a pagar la entrada que, en concepto de colaboración con la entidad almanseña, se cobra a todos los asistentes a los partidos de los equipos juveniles, con argumentos tan sólidos como que eran de la capital y que si en la capital no cobran entrada, no la iban a pagar en Almansa. Una actitud chulesca y prepotente de unos individuos e individuas que a punto estuvieron de crear un conflicto mayor al término del encuentro, precisamente por esa misma prepotencia, y chulería de la que hicieron gala.
La alineación que presentó Juan Carlos Martínez fue:
Jhon, Panchi, Vichi, Maca, Milán, Costa, Peque, Berna, Coto, Sapena, Oskar.
En el banquillo: Sergio, Alfon, Luis Gorreta, Villa, Kike, Chivu.
Podemos escuchar aquí al entrenador del Juvenil A: