Adrián Fajardo muestra sus cartas para luchar por la I Vuelta a Castilla-La Mancha
La I Vuelta a Castilla-La Mancha echaba a andar con una interesante y emocionante etapa (Ontur-Alcaraz), que tuvo a dos ciclistas castellano-manchegos como protagonistas, el sanclementino Miguel Moya (High Level Gsport) y el almanseño Adrián Fajardo (Vigo Rías Baixas).
En Ontur comenzaba la primera etapa y en la línea de salida, antes de comenzar a pedalear, se procedía a la presentación de equipos y corte de cinta por parte de las autoridades presentes: Julián Martínez, consejero de agricultura, ganadería y medio rural de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha; Jesús López, alcalde de Ontur; José Juan Fernández, director general de desarrollo rural; Ramón Sáez, delegado de agricultura en Albacete; Carlos Yuste, director general de deportes; Jesús Ortega, presidente de RECAMDER; y Vicente Alumbreros, presidente de la Federación de Ciclismo de Castilla-La Mancha.
Casi 120 ciclistas, repartidos en 17 equipos, tomaban la salida en esta primera etapa que recorría 153 kilómetros. Tras los primeros escarceos, sin éxito, el pelotón llegaba agrupado a Elche de la Sierra, donde se ubicaba la primera Meta Volante, con Sergio Serrano (High Level Gsport) puntuando primero. Seguidamente comenzaba la subida a El Peralejo, con un grupo de 25 ciclistas que se destacaban en los últimos repechos para que, Adrián Benito (Extremadura Pebetero), cruzase por el premio de la montaña como primer clasificado.
La segunda Meta Volante se situaba en Riópar y Pau Domenech (High Level Gsport) puntuaba en primera posición. Tras el paso por Riópar comenzaba la ascensión al Alto de las Crucetillas (1ª Categoría) y allí se desataba la gran batalla que terminaba con la fuga del almanseño Adrián Fajardo (Vigo Rías Baixas). El de Almansa abría hueco con respecto al grupo, pero Miguel Moya (High Level Gsport) le alcanzaba cuando se coronaba el Alto de las Crucetillas.
Los dos corredores lograban un margen de un minuto para afrontar el último tramo de la etapa. En los dos últimos kilómetros Miguel Moya lanzaba un duro ataque que le permitía llegar a la línea de Meta con una diferencia de casi 30 segundos sobre Fajardo. Tras ellos, Emilio Llopis (High Level Gsport) completaba el podio de honor de la etapa, a 51 segundos del vencedor.
El primer maillot carmesí se lo enfundaba Miguel Moya, junto al maillot verde de los puntos y el azul como mejor castellano-manchego. Por su parte, Adrián Fajardo se hacía con el maillot rojo de la montaña y con el blanco, correspondiente al primer Sub-23. El maillot amarillo de las Metas Volantes fue para Pau Domench.
La segunda etapa, con un recorrido prácticamente llano de 90 kilómetros, transcurre entre las localidades de Ruidera y Castellar de Santiago, en la provincia de Ciudad Real. Sin duda, la etapa perfecta para que los esprinters de la prueba se luzcan. La etapa pasará por Carrizosa, Villanueva de los Infantes, Almedina, Cozar, Torre de Juan Abad, además de Ruidera y Castellar de Santiago.
(FOTOS: Federación de Ciclismo de Castilla-La Mancha y Adrián Fajardo)





